lunes, 31 de agosto de 2009

Luto


Y de nuevo la misma vida.

La NO vida.

5 comentarios:

JJ dijo...

Bueno, siempre nos quedará Paris.

O algo asi.

Edu Solano Lumbreras dijo...

No es la NO vida.
O no debería serlo. A alguien a quien quiero en la misma tesitura le escribí esto:

EL CRISTAL CON EL QUE MIRO

Tal vez sea que tenga por costumbre,
don Gervasio, huir de la costumbre,
o que tenga ese raro privilegio
de tener un horario que no deja
espacio ninguno a crear rutinas.
O que soy un experto desde niño
en eso de mezclar sueño con vida
y confundir el uno con la otra,
y atesorar momentos especiales
día a día con fruición malsana;
día a día practico el optimismo
y día a día entreno la consciencia.

Es por eso, tal vez, mi buen Gervasio,
que si me aburro es puro despiste,
y tengo cierta alergia a la tristeza,
y bebo de la vida a grandes sorbos,
y encuentro fascinante casi todo.

Lo gris sólo te atrapa si te dejas;
bailo para que el día de mañana,
si sucede que caigo en la desgracia
nadie venga a quitarme lo bailado.



Claro que yo tampoco sé vivir.
Claro que yo también estoy improvisando.

Laluz dijo...

Es no vida cuando paso una hora encerrada en un coche para recorrer un trayecto de 20 min. Es no vida cuando me levanto a las 6 de la mañana y le roban tantas horas a mi(s) sueño(s).

A parte de eso, sólo pienso en exprimirle el jugo a la naranja e ir a París. O al fin del mundo.

ybris dijo...

Depende de la vida habitual que frecuentamos.
Algunos viven como sino vivieran.
O sea, siempre de luto.

Besos.

Beauséant dijo...

una vida que merezca la pena ser vivida..

en eso se resume todo